Casos como el de Twitter, y tantos otros que se han incrementado con la pandemia y el uso exponencial de Internet, son claros ejemplos de la vulnerabilidad a la que las empresas están expuestas en relación a sus sistemas.

Esto sucede, en parte, porque los delincuentes cibernéticos cuentan cada vez con más recursos y tecnologías, pero fundamentalmente, porque la seguridad informática es vista aún como un gasto innecesario; incluso en la actualidad en donde los datos son los activos más valiosos de las empresas.

Además, circula el mito de que el objetivo son solo las grandes empresas. Sin embargo, cualquier compañía puede ser víctima de un hackeo: existen ataques automatizados que simplemente reconocen qué sistema está vulnerable, sin reparar a quien pertenezca o a qué se dediquen.

A su vez, estamos viviendo un momento en donde la dependencia de la tecnología es cada vez mayor, con lo que resulta lógico protegerla para evitar estos graves perjuicios.

Entonces, ¿por qué invertir en una estrategia de seguridad informática?

Ahorrar tiempo y dinero
Si bien en un comienzo, invertir en seguridad puede parecer costoso, cuando un sistema fue vulnerado y está dañado, solucionar el desperfecto puede llevar mucho tiempo y los daños pueden ser mayores. De esta manera, es conveniente establecer un sistema de seguridad diseñado a medida, en donde los costos de mantenimiento preventivo siempre serán más rentables.

Evitar la filtración de datos
Recuerde que las claves de usuario no son totalmente seguras. Para proteger la información es necesario contar con una estrategia creada por especialistas, en donde se establezcan barreras más complejas que frenen a los delincuentes informáticos.

Protegerse del robo de la información
La venta de información corporativa es uno de los delitos cibernéticos más recurrentes y con mayor costo. Esta situación se complejiza con la pandemia y el trabajo remoto, ya que los colaboradores están manipulando información confidencial en sus ordenadores. Por esto, la protección de la información por parte de las empresas es urgente para evitar daños colaterales.

Construir una cultura de seguridad
Implementar medidas de seguridad y tomarse la cuestión en serio, impulsará un sentido de colaboración entre todos. Es vital que, además de la protección informática, predomine un mensaje en el que se establezca que todos son responsables de cuidar la información en la empresa.

Por último, tenga en cuenta que la inversión en seguridad es resultado de un análisis de riesgo directamente proporcional al valor de su información.

Para decidir cuánto debe invertir, evalúe el impacto de lo que sucedería si los sistemas dejaran de funcionar por un tiempo determinado (una hora, una semana, varias semanas). Esto le ayudará a tomar una real dimensión de sus riesgos e invertir en una estrategia a su medida.